Parece que fue ayer cuando al llegar a mi Aldea, uno de esos días, de esas tardes pasadas, un sábado o cualquier fin de semana y al estar aquí en ella, buscaba en un mueble donde guardaba mis discos de vinil y los revisaba, seleccionaba alguno tomaba ese empaque de cartón de 31 por 31 centímetros, sacaba un círculo de color negro de su envoltura, compuesto de surcos siguiendo el ritual se colocaba en un soporte que al accionar o mover la aguja giraba se instalaba sobre dicho elemento y de cada surco que lo integra se desprendían sonidos que se propagaban por todos los rincones de mi Aldea; estos círculos de música hoy en día para mi arte-objeto, venían con el empaque externo que mencione, adentro con una envoltura de hule que lo protegía de rayones además por lo general incluía fotos o una hoja de 30x30 cm. con las letras de las canciones uno se sentaba cómodamente a escuchar tal obra o se veía como avanzaba la aguja sobre ese acetato hasta que terminara el lado A y cambiar o voltear para escuchar el lado B en aquellos años se tenia que escuchar la obra completa, se compraba el disco porque se apreciaba todo el arte incluido en ese elemento, que todas las tardes se escuchaban en mi Aldea; cuando se iba a una fiesta o reunión era toda una travesía el transportar y viajar con algunos de ellos, un sustituto si así se quiere llamar fueron las cintas de audio mejor conocidas como cassettes donde se acostumbraba hacer un "playlist" de las mejores canciones para cada momento de esos vinilos y era la manera más sencilla evitando con ello no cargar con todos esos discos o cuando se viajaba en auto, estos elementos se hicieron más prácticos para poder llevar la música a cualquier lugar y para ello también surgió unos aparatos "novedosos" llamados walkman, que tocaban esas viejas cintas con aquellas canciones, algunos de ellos eran auto-reversibles y no se requería estar sacándolo para voltear la cinta además incluía radio, con estos elementos tanto los vinilos, como las cintas su principal cualidad es de que se tenían que escuchar de principio a fin, porque el estar retrocediendo o adelantando era algo complicado para atinar el instante preciso e inicio de alguna canción que mas me agradaba y por ello se escuchaba todo; en México en aquellos años era algo difícil conseguir algunos buenos discos de vinil y más sí era importado, por ello yo acostumbraba y muchos tal vez, a grabar directamente de la radio mis canciones favoritas en algunas cintas y esperar varios meses a que se editara o llegara aquí, pero afortunadamente surgieron las ediciones nacionales de discos de vinil de bandas importantes y qué cambiaron la música en aquellos años, estos discos usaban en esos ayeres los títulos traducidos como "Los chicos no lloran", "Desaparecer", "Amor extraño" etc. eran tan bizarras esas ediciones con traducción pero se agradecían porque se podían coseguir fácilmente..
La música de por sí abstracta pero con ese elemento físico lo era menos se podía poseer aquellas melodías, ver como la aguja tocaba esos discos de 33 rpm o de 45 rpm y recorría cada surco, como se brincaba o tener que pararte a cambiar ese disco o limpiarlo o poner una moneda pequeña para hacer peso y evitar que la canción cambiara de un lugar a otro o jugar a que eras el DJ, el picha disco de cada reunión, sí tal vez se tenia más tiempo, se vivía con menos prisa se apreciaba y valoraba ese objeto que hacia de muchos la vida más agradable....
Con los años la tecnología cambio, cierto día cuando viajaba fuera de mi aldea escuchaba platicas como: "Que van a salir los equipos de sonido con rayo láser" sonaba a ciencia ficción, sonaba futurista pero a finales de los ochentas principios de los noventas nos invadieron los "Compact Disc" CD elementos novedosos plateados de policarbonato con una superficie que almacena archivos o dígitos que al reflejar un rayo láser reproducía música que venia quién sabe de que "extraño" lugar pero ahí estaba, todo mundo quería uno de esos aparatitos, dejando en el olvido aquellos "enormes" discos de vinilo, pero con mejor nitidez de audio o sonido, por estos discos "fáciles" de transportar de poder adelantar o escuchar una y otra vez la misma canción, ya no se tenia que escuchar todo el disco, tampoco el cambiar de lado A por el lado B para escuchar esas canciones, ya no había ese contacto físico ese amorio entre la aguja y el vinil; las portadas de 31x31cm fueron suplantadas por pequeñas portadas de 12 x 12 cm. aproximadamente, en empaques cuadrados de plástico que tenían y tienen un costo elevado, pero aun así todavía mantienen ese sentido físico de las cosas, contienen la mayoria de las veces un "librito" booklet con fotos, letras de canciones etc. que elevaban su costo, pero se podía tener la música "verla" escucharla, mis empaques favoritos son los de cartón o digipack porque conservan algo de esa esencia del pasado y ese empaque de cartón con ediciones especiales se valoran más; con este nuevo avance surgieron a la par los aparatos portatiles para poder salir a cualquier lugar y llevar tu música a donde te trasladaras con estos innovadores Discman podias salir a correr con ellos sin que se brincara el láser e incluso existieron aditamentos para poder conectarlo al aparato reproductor de cualquier automóvil, aparatos que poco a poco fueron desapareciendo porque vendría algo "mejor"....
En poco tiempo en pocos años en días, en un parpadeo la música de manera física se empezó a desplazar casi deja de existir, esa música se comprimió se redujo en diversos formatos digitales, el mp3 que se emplea como mejor medio o el más socorrido para comprimir esas melodías, hoy en día la música existe pero no hay ese contacto con ella, no existe esa relacion intima, ahora consumimos piezas sueltas de diversos grupos, ya no se "detiene" el tiempo, ya no nos detenemos a escuchar esas obras completas creadas con algún propósito, la música se hizo más abstracta, solo vemos en una pantallita de led la portada, el nombre del grupo y canción; ya no existe el booklet, tampoco sabemos quién lo produce, los créditos, ni colaboraciones y letras; todo es un archivo comprimido que se transfiere a nuestros dispositivos de música portátil y aquellas obras conceptuales o temáticas, aquellas obras creadas para ser escuchadas de manera completa se dejaron a un lado, hoy solo pasan por nuestros oidos de manera dispersa, alternadas, aleatorias y sin una estructura o secuencia con la que fueron creadas, piezas sueltas, canciones dispersas, canciones que algunas veces no sabemos quién las cante pero suena bien, canciones qué: quito, borro, pego, transfiero, reproduzco y salto si me aburren en solo fracción de segundos, melodías que estan contenidas en "diminutos" (o no tanto) aparatos en donde podemos tener 8 gb, 16gb o 32 gb con cientos o miles de canciones que se transportan en ellos para reproducir esa música disfrutando de horas y horas de nuestras melodías favoritas.
Sea cual sea el formato la música sigue y seguirá existiendo en cualquier medio, yo disfrute de todos esos formatos antiguos y hoy en día los discos de vinil están resurgiendo como queriendo apoderarse de este presente y recordar el pasado que nos remiten a esas épocas a esos recuerdos; he comprado algunos y también conservo varios de estos formatos, desempolve esa vieja tornamesa que esta en un lugar especial en mi Aldea allá cerca de mi Lago, y a veces escucho esas viejas cintas, sigo comprando CD's porque a mi me agrada ver el diseño de las portadas, leer las canciones, saber quién produce esas canciones, quién colabora en ese disco; pero sea cual sea el formato, ellos son solo el medio principal para que esa música se reproduzca y forme parte de mi soundtrack de mi vida, de algunos instantes buenos o malos y me acompañan con estas melodías pero cualquiera que sea el equipo, el tornamesas, el aparato, lo que importa es la música que gira, que rota, que se comprime, que se archiva, que se copia, que se trasfiere, que se descarga, y se reproduce durante todos estos años en mi Aldea; el siguiente formato no se cual sea, ni como sera, pero seguro tendrá el mismo fin; reproducir esas melodías que "giran" para llegar a nuestros oídos y generar en nosotros diversas sensaciones .....
Sí me agradaban más esos viejos viniles, la existencia de esa relación casi amorosa entre elementos inanimados qué al estar en contacto directo surgen de esas bocinas melodías que se filtraban por todos los rincones de mi Aldea.... Afortunadamente hoy en día puedo contar con todos estos formatos que coexisten y que utilizo de acuerdo a los diversos momentos y situaciones que se viven en mi Aldea pongo discos de vinil, cintas, cds, o formatos digitales, no importa; la música me acompaña en cualquier momento para poder recordar por medio de ella como eran aquellos instantes, en qué la música estaba presente de manera física y no comprimida como algo inexistente. ......
En poco tiempo en pocos años en días, en un parpadeo la música de manera física se empezó a desplazar casi deja de existir, esa música se comprimió se redujo en diversos formatos digitales, el mp3 que se emplea como mejor medio o el más socorrido para comprimir esas melodías, hoy en día la música existe pero no hay ese contacto con ella, no existe esa relacion intima, ahora consumimos piezas sueltas de diversos grupos, ya no se "detiene" el tiempo, ya no nos detenemos a escuchar esas obras completas creadas con algún propósito, la música se hizo más abstracta, solo vemos en una pantallita de led la portada, el nombre del grupo y canción; ya no existe el booklet, tampoco sabemos quién lo produce, los créditos, ni colaboraciones y letras; todo es un archivo comprimido que se transfiere a nuestros dispositivos de música portátil y aquellas obras conceptuales o temáticas, aquellas obras creadas para ser escuchadas de manera completa se dejaron a un lado, hoy solo pasan por nuestros oidos de manera dispersa, alternadas, aleatorias y sin una estructura o secuencia con la que fueron creadas, piezas sueltas, canciones dispersas, canciones que algunas veces no sabemos quién las cante pero suena bien, canciones qué: quito, borro, pego, transfiero, reproduzco y salto si me aburren en solo fracción de segundos, melodías que estan contenidas en "diminutos" (o no tanto) aparatos en donde podemos tener 8 gb, 16gb o 32 gb con cientos o miles de canciones que se transportan en ellos para reproducir esa música disfrutando de horas y horas de nuestras melodías favoritas.
Sea cual sea el formato la música sigue y seguirá existiendo en cualquier medio, yo disfrute de todos esos formatos antiguos y hoy en día los discos de vinil están resurgiendo como queriendo apoderarse de este presente y recordar el pasado que nos remiten a esas épocas a esos recuerdos; he comprado algunos y también conservo varios de estos formatos, desempolve esa vieja tornamesa que esta en un lugar especial en mi Aldea allá cerca de mi Lago, y a veces escucho esas viejas cintas, sigo comprando CD's porque a mi me agrada ver el diseño de las portadas, leer las canciones, saber quién produce esas canciones, quién colabora en ese disco; pero sea cual sea el formato, ellos son solo el medio principal para que esa música se reproduzca y forme parte de mi soundtrack de mi vida, de algunos instantes buenos o malos y me acompañan con estas melodías pero cualquiera que sea el equipo, el tornamesas, el aparato, lo que importa es la música que gira, que rota, que se comprime, que se archiva, que se copia, que se trasfiere, que se descarga, y se reproduce durante todos estos años en mi Aldea; el siguiente formato no se cual sea, ni como sera, pero seguro tendrá el mismo fin; reproducir esas melodías que "giran" para llegar a nuestros oídos y generar en nosotros diversas sensaciones .....
Sí me agradaban más esos viejos viniles, la existencia de esa relación casi amorosa entre elementos inanimados qué al estar en contacto directo surgen de esas bocinas melodías que se filtraban por todos los rincones de mi Aldea.... Afortunadamente hoy en día puedo contar con todos estos formatos que coexisten y que utilizo de acuerdo a los diversos momentos y situaciones que se viven en mi Aldea pongo discos de vinil, cintas, cds, o formatos digitales, no importa; la música me acompaña en cualquier momento para poder recordar por medio de ella como eran aquellos instantes, en qué la música estaba presente de manera física y no comprimida como algo inexistente. ......
